A partir de febrero, los pasajeros que viajen dentro de Estados Unidos y no presenten una Real ID o un pasaporte vigente en los controles de seguridad deberán pagar una tarifa de 45 dólares, anunció la Administración de Seguridad del Transporte (TSA).
El cobro forma parte del plan federal para garantizar que todos los pasajeros cuenten con identificaciones verificadas a nivel nacional. Según la TSA, la tarifa cubrirá los costos administrativos del proceso de verificación, bajo el argumento de que no debe recaer en los contribuyentes.
La agencia había propuesto inicialmente un monto de 18 dólares, pero este aumentó tras el análisis de costos operativos.
La Real ID entra plenamente en vigor
La Ley Real ID, aprobada en 2005 y pospuesta en varias ocasiones, entró en vigor en mayo pasado. Hasta ese momento, la mayoría de los viajeros podían volar dentro del país con licencias de conducir estatales que no cumplían con los estándares federales.
Para obtener la Real ID se requiere presentarse en una oficina reguladora de vehículos de motor y entregar
- Nombre completo.
- Fecha de nacimiento.
- Número de Seguro Social.
- Dos comprobantes de residencia.
- Verificación de estatus legal en EE.UU.
Pasajeros internacionales
En el caso de migrantes indocumentados que salgan del país siguiendo procesos de autodeportación, la TSA precisó que no se les negará abordar vuelos internacionales por este requisito.










