La Asamblea Nacional de Francia aprobó con 255 votos a favor y 146 en contra, la suspensión temporal de la reforma de pensiones. La medida da un respiro al gobierno del primer ministro Sébastien Lecornu y reduce el riesgo de una moción de censura promovida por los socialistas.
La iniciativa, incluida en el proyecto de ley de financiación de la Seguridad Social, detiene hasta enero de 2028 el aumento de la edad de jubilación a 64 años y el incremento de los trimestres necesarios para acceder a una pensión completa.
El texto contó con el respaldo del Partido Socialista, Los Verdes y la Agrupación Nacional de Marine Le Pen, mientras que el partido Renacimiento, del presidente Emmanuel Macron, se abstuvo. En contra votaron La Francia Insumisa (LFI) y los Comunistas.
El líder socialista Olivier Faure celebró el resultado y calificó la medida como “una primera victoria contra el macronismo”. También llamó a los franceses a elegir en 2027 entre mantener la suspensión con la izquierda o elevar la edad de retiro a 67 años con la derecha.
La suspensión fue una promesa de Lecornu para evitar que los socialistas respaldaran una moción de censura que amenazaba la estabilidad de su gobierno.
