Al menos 12 personas murieron y 27 resultaron heridas en un atentado suicida con bomba frente a un tribunal en Islamabad, informó el ministro del Interior de Pakistán. El ataque, reivindicado por el Movimiento de los Talibanes de Pakistán (TTP), es el primero de este tipo en la capital en varios años.
De acuerdo con las autoridades, el atacante detonó los explosivos cerca de un vehículo policial, provocando el pánico en una zona que alberga oficinas gubernamentales. Tropas paramilitares acordonaron el área tras la explosión.
En un comunicado, el TTP afirmó que continuará atacando a quienes “dictan sentencias basadas en leyes no islámicas”, así como a quienes las apliquen o protejan. Su objetivo es que impere la sharía en todo el país.
El primer ministro Shehbaz Sharif responsabilizó al TTP y a separatistas de Baluchistán, grupos implicados en ataques contra fuerzas de seguridad.
Aunque Islamabad había permanecido relativamente segura desde 2022, el país enfrenta un resurgimiento de la violencia, atribuida a milicianos que operan desde territorio afgano.
El gobierno pakistaní mantiene tensas relaciones con Kabul, al que acusa de dar refugio a los talibanes pakistaníes, algo que el régimen afgano niega.















