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La OMDAI Sport México emitió un comunicado en el que responsabiliza parcialmente a Liam Lawson por el incidente ocurrido durante la primera vuelta del Gran Premio de México. El piloto de Racing Bulls se encontró con dos comisarios de pista cuando regresaba tras reparar su monoplaza dañado por un contacto con Carlos Sainz.

Según la FIA, se había notificado que Lawson estaba fuera del grupo principal, pero al reincorporarse se encontró con personal aún trabajando en la curva 1. La federación internacional abrió una investigación para determinar por qué los oficiales seguían en la pista, aunque la OMDAI también llevó a cabo su propio análisis.

En su informe, la OMDAI destacó que el equipo había advertido a Lawson sobre la presencia de escombros y doble bandera amarilla. Aun así, las imágenes muestran que el piloto “mantiene la línea de carrera sin reducir velocidad, a pesar de la visibilidad de los comisarios”.

Las capturas de las cámaras a bordo confirmaron que el vehículo pasó muy cerca de la zona donde los oficiales retiraban restos del accidente. “El coche se mantuvo en la trayectoria ideal, sin modificar el ángulo del volante”, señaló el organismo.

Lawson expresó su enojo por lo ocurrido: “Fue inaceptable. Había dos personas cruzando la pista y casi los golpeo. Nunca había vivido algo tan peligroso”. La FIA sigue analizando los hechos para reforzar las medidas de seguridad en futuras carreras.