El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, consideró prematuro entregar misiles Tomahawk de largo alcance a Ucrania, al señalar que primero busca asegurar la paz con Rusia.
«Con suerte, no los necesitarán. Con suerte, podremos terminar la guerra sin pensar en los Tomahawks», declaró en una conferencia conjunta con su homólogo ucraniano, Volodymyr Zelensky, en Washington.
Trump afirmó que confía en que el presidente ruso, Vladimir Putin, pondrá fin a la invasión iniciada en 2022, tras mantener una llamada con él y acordar una nueva cumbre en Budapest. Zelensky, sin embargo, discrepó al afirmar que Putin “no está listo para la paz”.
Ucrania ha pedido los misiles para reforzar su defensa, mientras Trump advirtió que su país debe evitar “agotar” sus propias reservas.
Tras reunirse con Volodymyr Zelenski en la Casa Blanca, Donald Trump partió hacia la base aérea de Andrews, en Maryland, desde donde abordó el Air Force One con destino a Palm Beach, Florida, para pasar el fin de semana.
El mandatario dejó a Zelenski solo ante los medios durante la rueda de prensa posterior, realizada fuera de la Casa Blanca.
“Hemos decidido que de momento no vamos a hablar de forma pública sobre misiles de largo alcance”, declaró el presidente ucraniano.
