De acuerdo con información de The New York Times, luego de más de 100 días de conflicto, la limitada efectividad de Israel en neutralizar a Hamas ha suscitado incertidumbres entre sus altos mandos militares respecto a la factibilidad inmediata de alcanzar los objetivos bélicos primordiales del país: la eliminación de Hamas y el rescate de rehenes israelíes en Gaza.
En esta etapa de la guerra, Israel controla un área menor de Gaza de lo que sus planes iniciales habían proyectado. Esta lentitud inesperada ha provocado que algunos comandantes, en privado, critiquen la estrategia gubernamental para Gaza, concluyendo que la liberación de más de 100 rehenes israelíes en la región solo podría asegurarse mediante la diplomacia y no por la fuerza.
Cuatro altos líderes militares, en entrevistas anónimas debido a restricciones de comunicación pública, han indicado que los objetivos de liberar rehenes y desmantelar a Hamas son ahora incompatibles. Se debate la necesidad de tiempo para erradicar completamente a Hamas, que implica combatir en su red de túneles subterráneos, y la presión de aliados de Israel para terminar el conflicto rápidamente, dada la creciente cifra de bajas civiles.
Algunos comandantes israelíes señalan que los dos objetivos gubernamentales principales son incongruentes, ya que erradicar a Hamas requeriría una guerra prolongada, poniendo en riesgo la vida de los rehenes.
Ronen Bergman y Patrick Kingsley, para evaluar la campaña militar de Israel, analizaron planes de batalla confidenciales y entrevistaron a líderes militares y civiles israelíes de alto rango.
Los generales sugieren que una batalla extendida para desmantelar a Hamas probablemente resultaría en la muerte de rehenes israelíes en Gaza desde el 7 de octubre, cuando militantes de Hamas invadieron Israel, causando aproximadamente 1.200 muertes y capturando alrededor de 240 personas. Aunque Hamas liberó a más de 100 rehenes en noviembre, ha declarado que no soltará a los restantes sin un cese total de hostilidades por parte de Israel. Se cree que la mayoría de los rehenes restantes están en manos de células de Hamas en su extensa red de túneles bajo Gaza.
Gadi Eisenkot, exjefe del ejército y miembro del gabinete de guerra, expresó en una entrevista televisiva que es ilusorio pensar en un rescate exitoso de los rehenes a través de operaciones militares, destacando la necesidad de priorizar el rescate de civiles sobre el combate al enemigo.