La ciudad de Bali, en Indonesia, es un destino turístico al que ha llegado la presencia de los cárteles mexicanos, aunque también la de grupos criminales de Rusia y China.
De acuerdo con el medio The Daily Telegraph, se han identificado las disputas entre los cárteles mexicanos y rusos en ese país, donde las autoridades han detectado la presencia del Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación, además del Primeiro Comando da Capital, de Brasil.
En Bali se tiene un reporte de las operaciones de la banda «14K» de China, que ha operado durante décadas; pero ahora se teme que la presencia de grupos latinoamericanos incremente la violencia en la región.
La publicación señala que estos grupos se establecieron en Bali derivado de las medidas restrictivas del presidente Donald Trump, así como la cercanía con Australia y Nueva Zelanda.
Las investigaciones periodísticas destacan que los grupos del crimen organizado en Latinoamérica actúan de manera muy violenta para tomar territorios, a diferencia de los chinos, que “operan de manera relativamente pacífica”.
Por su parte, la Agencia Nacional de Narcóticos de Indonesia advirtió que la isla de Bali se podría convertir en una “zona de guerra”, si no se frena la actuación de cárteles como los mexicanos.
