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El Ejército israelí destruyó la Torre Ghafri, el rascacielos más alto de Gaza, de 18 pisos y 60 apartamentos. Según un comunicado militar, Hamás habría instalado en el edificio “sistemas de inteligencia y puestos de observación” para vigilar a las tropas, aunque no se presentaron pruebas que respalden la afirmación.

Antes del ataque, el Ejército ordenó la evacuación de los residentes de la torre y las tiendas de campaña cercanas, donde se refugiaban víctimas desplazadas.

Los gazatíes consideran que la medida busca forzar al millón de habitantes de Gaza a desplazarse hacia el sur ante una posible invasión terrestre israelí en la capital.

En la última semana, la zona portuaria de la ciudad de Gaza y el barrio de Rimal sufrieron afectaciones por la demolición de rascacielos y bombardeos. Los ataques han dejado decenas de muertos y graves daños a la infraestructura de la ciudad.