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Marc Márquez ha demostrado una vez más por qué es uno de los grandes del motociclismo. El piloto español regresó tras el parón veraniego con un fin de semana impecable en Austria, llevándose tanto la carrera sprint como la del domingo en el Red Bull Ring, un trazado que se le había resistido a lo largo de toda su carrera. Con esta victoria, Márquez suma su sexto doblete consecutivo en la temporada.

En la competencia dominical, el piloto de Ducati se mantuvo expectante hasta que, a ocho vueltas del final, adelantó a Marco Bezzecchi para tomar el liderato definitivo. El italiano perdió fuelle y acabó tercero, cediendo la segunda posición al joven Fermín Aldeguer, que firmó una brillante actuación. Márquez, en cambio, se consolidó con su noveno triunfo en 13 carreras largas del campeonato.

El triunfo en Austria no solo le permite añadir un circuito más a su lista, sino que lo acerca al pleno histórico: solo le faltan Indonesia y Portugal, aún pendientes en este calendario, para haber ganado en todos los escenarios de MotoGP. De mantener este nivel, el piloto español podría incluso asegurar el campeonato antes de llegar a estas citas.

El panorama en la clasificación general favorece aún más al de Cervera, ya que sus rivales directos no estuvieron a la altura. Àlex Márquez fue décimo y Bagnaia apenas octavo, lo que permitió a Marc ampliar su ventaja hasta los 142 y 197 puntos respectivamente. Con 418 unidades, el liderato se afianza y la lucha por el título parece cada vez más definida.

Hungría será el siguiente reto para Márquez, que parece encaminado hacia su noveno título mundial, el séptimo en MotoGP. Su dominio absoluto en cada circuito y la regularidad en resultados hacen pensar que estamos ante una de las campañas más contundentes de la historia reciente del motociclismo.