En la antesala del compromiso contra Querétaro, el América rindió homenaje a dos jugadores que se han convertido en pilares de su reciente éxito. Alejandro Zendejas fue reconocido por sus 150 partidos disputados con las Águilas, mientras que Álvaro Fidalgo celebró el récord de llegar a los 200 encuentros oficiales.
Zendejas llegó desde Zacatepec tras pasar por la MLS, y no tardó en ganarse un lugar indiscutible en el once titular. Sus actuaciones como extremo derecho fueron decisivas en el tricampeonato, y para este torneo estrenó el dorsal 10, heredando una camiseta emblemática que portaron leyendas como Zague y Cuauhtémoc Blanco.
El mediocampista español Álvaro Fidalgo, fichado en la etapa de Santiago Solari, llegó sin grandes reflectores, pero conquistó a la afición con su visión de juego, entrega y consistencia. Su influencia en el medio campo ha sido determinante para los éxitos recientes de la institución.
El reconocimiento, más allá de ser una ceremonia simbólica, refleja la importancia de la continuidad y la estabilidad en el plantel. América entiende que la lealtad y el rendimiento prolongado son activos que fortalecen su proyecto deportivo.
Este tipo de homenajes consolidan el sentido de pertenencia y reafirman que en Coapa, la historia se escribe con trabajo, constancia y amor por la camiseta.