La juventud se impuso con autoridad en el National Bank Open, donde Ben Shelton y Victoria Mboko se consagraron campeones en una doble jornada que quedará en la memoria. Shelton, de 22 años, logró su primer Masters 1000 tras derrotar en tres sets a Karen Khachanov por 6-7 (5), 6-4, 7-6 (3), convirtiéndose en el primer estadounidense en ganar este evento desde Andy Roddick en 2003.
El cuarto sembrado mostró madurez en momentos decisivos, con un servicio demoledor y mentalidad inquebrantable. La victoria frente al ruso se suma a sus recientes éxitos en Tokio y Houston, consolidándolo como una figura ascendente del tenis masculino. Su nuevo ranking lo coloca en el sexto lugar del mundo, confirmando su meteórico ascenso.
En la rama femenina, el cuento de hadas fue protagonizado por Victoria Mboko. Con apenas 18 años y jugando con una muñeca lesionada, la canadiense superó por 2-6, 6-4 y 6-1 a Naomi Osaka, ex número uno del mundo, para obtener su primer título en el WTA Tour. La ovación del público local reflejó la emoción de un momento histórico.
Mboko demostró temple al vencer a campeonas como Coco Gauff, Sofia Kenin y Elena Rybakina en su camino a la gloria. Su notable actuación no solo le permitió saltar 60 puestos en el ranking, sino también unirse al selecto grupo de campeonas canadienses en este torneo.
La jornada reflejó una renovación generacional en el tenis profesional. Shelton y Mboko no solo ganaron trofeos, también se ganaron el respeto del circuito y el cariño de sus naciones. El futuro del tenis, sin duda, llegó a Montreal.