El Tour de Francia sufre una nueva baja de peso. Mathieu van der Poel, uno de los protagonistas de la competencia, ha sido obligado a retirarse debido a una neumonía detectada tras presentar fiebre durante la jornada de descanso. El neerlandés no tomará la salida en la etapa 16 con destino en Montpellier.
Su equipo, Alpecin-Deceuninck, informó que Van der Poel fue ingresado en un hospital de Narbona donde se le diagnosticó la infección respiratoria. El nieto del mítico Raymond Poulidor ya venía mostrando señales de fatiga en los últimos días y su estado empeoró considerablemente.
Van der Poel había iniciado con fuerza la ronda gala: ganó la segunda etapa, portó cuatro días el maillot amarillo, y fue segundo en la cuarta etapa. Incluso, durante la novena y la undécima jornada, mantuvo protagonismo con fugas y remates explosivos que lo mantuvieron como uno de los más combativos.
El belga era uno de los grandes aspirantes para la última etapa, que por su perfil se ajustaba perfectamente a sus habilidades. Su baja representa un duro golpe al espectáculo de la competencia.
Con la marcha de Van der Poel y la salida previa de Evenepoel, el dominio de Pogacar parece no tener freno. Pero el ciclismo es impredecible, y el Tour aún tiene sorpresas reservadas. Lo que no cambia es el legado que Van der Poel sigue construyendo en cada pedalazo.