El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, no volverá a comparecer ante el tribunal por su juicio de corrupción hasta septiembre, luego de que las audiencias programadas para esta semana fueran canceladas por motivos de salud y el inminente receso de verano en el sistema judicial.
Su abogado, Amit Hadad, solicitó la suspensión de las audiencias tras informar que Netanyahu sufrió una intoxicación alimentaria. Aunque la Fiscalía del Estado propuso reprogramarlas para el miércoles y jueves, el Tribunal del Distrito de Jerusalén decidió aplazarlas hasta después del receso.
El pasado 16 de julio Netanyahu también pidió interrumpir otra audiencia, esta vez debido a los bombardeos israelíes sobre Siria tras enfrentamientos en la región siria de Al Sueida.
Netanyahu es el primer jefe de Gobierno en funciones en ser juzgado en la historia de Israel. Enfrenta cargos por cohecho, fraude y abuso de confianza en tres casos que giran en torno a su supuesta relación con empresarios influyentes y medios de comunicación, con beneficios personales y políticos como trasfondo.
