Carlos, el hijo menor de la familia Romero, fue localizado tras desaparecer el 4 de julio durante las inundaciones registradas en Texas, Estados Unidos.
El niño de dos años fue arrastrado por la corriente junto a sus padres, los mexicanos Leonardo y Natalia, quienes también fallecieron y cuyos cuerpos fueron localizados el pasado 12 de julio.
Leonardo, el hijo mayor de la pareja y hermano de Carlos, fue el único sobreviviente; él fue rescatado y llevado a un hospital horas después de suceder la tragedia.
