Saltar al contenido principal

Estados Unidos y el Grupo de los Siete (G7) acordaron respaldar una propuesta que permitiría eximir a las grandes multinacionales estadounidenses de ciertos elementos del impuesto mínimo global del 15 %, pactado en la OCDE.

El acuerdo busca evitar que estas empresas paguen dicho impuesto en los países donde operan.

El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, celebró el avance, asegurando que se han protegido los intereses estadounidenses. A cambio, solicitó al Congreso eliminar la cláusula 889, que contemplaba represalias fiscales.

El G7 destacó que el acuerdo reconoce las leyes tributarias mínimas vigentes en Estados Unidos y busca ofrecer mayor estabilidad al sistema fiscal internacional.

Los representantes del grupo señalaron su intención de alcanzar una solución “aceptable e implementable para todos”.

La medida surge tras la orden ejecutiva del presidente Donald Trump, emitida en enero, que declaró inaplicable en Estados Unidos el acuerdo fiscal global de 2021 promovido por la administración Biden y firmado por casi 140 países.

Trump también había prometido imponer represalias a los países que penalizaran a empresas estadounidenses bajo ese marco.