En una final de alta exigencia, Jessica Pegula mostró temple y precisión para imponerse ante la exnúmero uno del mundo, Iga Swiatek, y llevarse el título del Abierto de Bad Homburg. La estadounidense se impuso 6-4 y 7-5 con un juego equilibrado y sin ceder su servicio.
La clave estuvo en la firmeza mental de Pegula, quien supo cuándo acelerar y neutralizó el liftado agresivo de Swiatek. Su único quiebre en el primer set fue suficiente para desnivelar. En el segundo, aprovechó un momento de duda de la polaca y cerró con autoridad.
Swiatek buscaba su primer título en césped y aunque mostró crecimiento en su juego sobre esta superficie, no logró consolidar sus oportunidades. Pegula, por su parte, sumó su segundo título sobre hierba, ratificando su adaptación al terreno más rápido del circuito.
Con este triunfo, Pegula suma su tercer campeonato de la temporada y se posiciona como una rival a temer rumbo a Wimbledon. Su saque firme y lectura táctica fueron determinantes para controlar los intentos de remontada de su oponente.
Ambas tenistas se elogiaron mutuamente al final. Swiatek reconoció la calidad de Pegula, mientras que la estadounidense valoró el esfuerzo de la polaca. La final deja buenas sensaciones para ambas y anticipa una interesante rivalidad sobre césped.