Elon Musk, consejero delegado de la empresa aeroespacial SpaceX, dijo que no dará de baja a la aeronave Dragon, usada por Estados Unidos para transportar material y personas a la Estación Espacial Internacional, después de amenazar con desmantelarla durante su pelea en redes con el presidente Donald Trump.
“Buen consejo. Está bien, no desmantelaremos a Dragon”, escribió Musk en X en respuesta a un usuario que le sugirió que Trump y él eran mejores que “el tira y afloja” y les instaba a “calmarse y relajarse un par de días”.
La decisión, que ahora ha revocado, fue anunciada por el propio magnate como uno de los reproches que se intercambió con el neoyorquino, quien le amenazó antes con poner fin a los contratos que el dueño de X tiene con el gobierno federal.
SpaceX es uno de los principales contratistas de la NASA y ha recibido más de 17 mil millones de dólares por parte del Gobierno federal en los últimos diez años.
El pasado mes de marzo Dragon trajo de vuelta a los astronautas de la NASA, Butch Wilmore y Suni Williams, tras meses sin poder regresar a la Tierra.