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La franquicia de Las Vegas ha asegurado la permanencia de uno de sus jugadores más consistentes: el pateador de despeje AJ Cole. Con una extensión de contrato por cuatro años y $15.8 millones, incluyendo $11 millones garantizados, Cole se convierte en el pateador mejor remunerado en la historia de la NFL.

Desde su llegada en 2019 como agente libre no reclutado, Cole ha demostrado ser una pieza clave en los equipos especiales de los Raiders. Su promedio de 48.6 yardas por despeje en 374 intentos y solo 30 touchbacks evidencian su precisión y potencia.

En la temporada 2024, Cole destacó al promediar 50.8 yardas por despeje, ubicándose tercero en la liga, y logró colocar 27 de sus 67 despejes dentro de la yarda 20 del oponente. Además, su papel como sostén en intentos de gol de campo y puntos extra resalta su versatilidad.

Su desempeño no ha pasado desapercibido, siendo seleccionado al Pro Bowl en tres ocasiones consecutivas (2021-2023) y nombrado All-Pro en 2021 y 2023. Estos logros consolidan su reputación como uno de los mejores en su posición.1

Con esta extensión, los Raiders no solo aseguran a un jugador de élite, sino que también refuerzan la estabilidad de su unidad de equipos especiales, vital para el control del juego de posición en cada encuentro.