El jurado del Festival de Cannes, presidido por Juliette Binoche, entregó la Palma de Oro al cineasta iraní Jafar Panahi por la cinta “Un simple accidente”.
Después de ganar el León de Oro de Venecia en el año 2000 por “El círculo” y de llevarse el Oso de Oro de Berlín en 2015 por “Taxi Teherán”, Panahi logra así una triple corona que le iguala a cineasta legendarios como Michelangelo Antonioni y Robert Altman.
Perseguido, encarcelado y censurado numerosas veces por el gobierno de la república islámica iraní, la infatigable labor de Panahi figura como una extraordinaria muestra de coraje. Como señaló Binoche al anunciar la entrega de esta merecida Palma de Oro, “estamos ante la obra de un autor capaz de convertir la tiniebla en perdón”.
“Un simple accidente” cuenta la historia de un grupo de represaliados políticos que, en el Irán actual, avista la posibilidad de vengarse de su torturador cuando uno de ellos lo reconoce gracias al ruido de sus pasos.
