El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue trasladado a cuidados semi-intensivos luego de permanecer tres semanas en una UCI de un hospital de Brasilia, donde permanece internado tras una operación intestinal el 13 de abril.
De acuerdo con el último reporte médico, Bolsonaro permanece «clínicamente estable» y comenzó a recibir dieta por vía oral, luego de que le fuera retirada la sonda nasogástrica.
El líder ultraderechista ha sufrido problemas digestivos recurrentes desde el 6 de septiembre de 2018, cuando durante su campaña para las elecciones presidenciales de ese año, fue apuñalado en la región abdominal.
Bolsonaro está internado desde el 11 de abril, cuando manifestó intensos dolores durante un acto político en el que buscaba apoyo para un proyecto de amnistía para los condenados por la intentona golpista del 8 de enero de 2023.