El abogado de Harvey Weinstein solicitó sin éxito la anulación del juicio penal en Nueva York por abuso sexual y violación en tercer grado que enfrenta el productor cinematográfico, al alegar que “el jurado ha sido contaminado”.
La defensa sostuvo que el juicio debía ser anulado por la declaración de la denunciante Miriam Haley, que acusa a Weinstein de haberle practicado sexo oral por la fuerza y haberla violado en otra ocasión en 2006, sobre su supuesto desconocimiento acerca de otras víctimas.
Sentado en su silla de ruedas frente a su acusadora, Weinstein, de 73 años, por momentos movía la cabeza como refutando sus declaraciones.
Disminuido por una larga lista de problemas de salud, logró que el juez le autorizara finalmente dormir en el hospital y no en la cárcel de Rikers Island donde cumple otra condena dictada por un tribunal de California por violación.
El exmagnate del cine, cuya caída provocó el movimiento #MeToo, había sido condenado en 2020 a 23 años de cárcel por violación y agresión sexual. Pero el Tribunal de Apelaciones de Nueva York anuló la condena por defectos de forma.