Una jueza federal de Estados Unidos aplazó para el 25 de abril la primera comparecencia de Luigi Mangione, el joven acusado de matar al director ejecutivo de la aseguradora UnitedHealthcare, Brian Thompson.
Un gran jurado imputó ayer a Mangione cuatro delitos federales, incluido el de asesinato con arma de fuego, que está castigado con cadena perpetua, y se esperaba que hoy acudiera a una audiencia, pero la nueva jueza asignada al caso, Margaret M. Garnett, ordenó un cambio de fecha.
La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, ordenó a principios de mes a los fiscales de Nueva York solicitar la pena de muerte para Mangione si es condenado, y sus abogados han intentado imposibilitar ese castigo y han advertido de que se está privando a su cliente del “debido proceso”.
El caso ha sido muy mediático en la Unión Americana, pues muchos consideran al joven, físicamente atractivo, un héroe frente al negocio de las aseguradoras privadas; en sus citas judiciales ha sido recibido por grupos de fans y una campaña de recaudación para sus gastos legales roza el millón de dólares.
Aparte de la acusación federal, Mangione afronta cargos en las jurisdicciones de Manhattan, un total de once delitos con una pena máxima de cadena perpetua, y de Pensilvania, donde fue detenido cinco días después de su fuga; en ambos casos se ha declarado no culpable.
