La Asociación de Jugadores Profesionales de Tenis (PTPA, por sus siglas en inglés), cofundada por el destacado tenista serbio Novak Djokovic, ha emprendido acciones legales sin precedentes contra los principales organismos rectores del tenis mundial: la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP), la Asociación de Tenis Femenino (WTA), la Federación Internacional de Tenis (ITF) y la Agencia Internacional para la Integridad del Tenis (ITIA). Estas demandas, presentadas en Estados Unidos, Reino Unido y la Unión Europea, acusan a estas entidades de prácticas anticompetitivas y de operar como un «cártel» que explota y silencia a los jugadores.
La PTPA denuncia que los organismos mencionados han establecido acuerdos para suprimir la competencia entre torneos, limitando así las oportunidades de ingresos de los tenistas. Según la asociación, los jugadores reciben solo el 17% de los ingresos generados por el tenis, una cifra significativamente inferior al porcentaje que perciben atletas de otros deportes profesionales, que oscila entre el 35% y el 50%. Además, critican el extenso calendario de 11 meses, que impide un descanso adecuado y pone en riesgo la salud de los deportistas.
Otro punto de conflicto es el sistema de clasificación y la obligatoriedad de participar en determinados torneos, lo que, según la PTPA, limita la capacidad de los jugadores para competir en eventos alternativos que podrían ofrecer mejores condiciones económicas. También se destacan las condiciones extremas en las que se compite, como temperaturas elevadas y horarios de partidos que se extienden hasta altas horas de la madrugada, lo que afecta negativamente el rendimiento y la salud de los tenistas.
En respuesta, los organismos demandados han rechazado las acusaciones, calificándolas de infundadas y defendiendo su labor en el desarrollo y crecimiento del tenis a nivel mundial.
