Travis Kelce, el legendario ala cerrada de los Kansas City Chiefs, dejó en el aire su continuidad en la NFL tras la derrota en el Super Bowl LIX ante los Philadelphia Eagles. Con 35 años y una carrera llena de éxitos, el futuro miembro del Salón de la Fama aseguró que no tomará una decisión apresurada sobre su posible regreso para la temporada 2025. “He jugado más fútbol americano que nadie en los últimos años, y eso pasa factura”, comentó en su podcast “New Heights”, junto a su hermano Jason.
A pesar de ser una pieza clave en la ofensiva de Kansas City, su rendimiento en la temporada 2024 mostró una ligera baja. Registró 823 yardas por recepción y solo tres touchdowns, sus peores números desde su año de novato. En el Super Bowl, fue limitado a cuatro recepciones para 39 yardas, sin poder evitar la derrota de su equipo por 40-22.
Kelce, quien ha disputado cinco Super Bowls y ha ganado tres con los Chiefs, aún se siente en condiciones de seguir compitiendo. Sin embargo, reconoce que el desgaste físico acumulado a lo largo de más de una década en la liga es un factor determinante en su decisión. “No quiero tomar una decisión loca ahora, necesito tiempo para reflexionar”, afirmó con evidente emoción.
Aunque en la semana previa al Super Bowl insinuó que regresaría en 2025, su discurso cambió tras la dura caída en la final. Su prioridad ahora es estar con sus compañeros y entrenadores, pero su futuro sigue siendo una incógnita.
