El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que “no hay justificación para ningún tipo de violencia y no toleraremos ningún ataque a ninguna de las comunidades de nuestra nación”. Esto a través de un comunicado luego del atropellamiento masivo en Nueva Orleans.
En el documento emitido por la Casa Blanca, Biden aseguró que “el FBI está tomando la iniciativa en la investigación y está investigando este incidente como un acto de terrorismo”.
Agradeció la “valiente y rápida respuesta de las fuerzas de seguridad locales para evitar aún más muertes y lesiones”.
Además, afirmó que ordenó a su equipo que “se asegure de que todos los recursos estén disponibles mientras las fuerzas de seguridad federales, estatales y locales trabajan asiduamente para llegar al fondo de lo sucedido lo más rápido posible y para garantizar que no quede ninguna amenaza restante de ningún tipo”.
Por su parte, el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, atribuyó a un extranjero lo sucedido en Nueva Orleans.
“Cuando digo que los criminales que vienen son mucho peores que los criminales que tenemos en nuestro país esa declaración es constantemente refutada por los demócratas y los medios de noticias falsas, pero resulta ser verdad. El índice de crímenes de nuestro país está a niveles que nunca antes se han visto”, escribió en su red social Truth Social.
También envió condolencias a todos los seres queridos de todas las víctimas: “La Administración Trump apoyará totalmente a la ciudad de Nueva Orleans mientras investigamos este acto de pura maldad”.