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La presión que rodea a Kylian Mbappé no pasa desapercibida para Didier Deschamps. El técnico francés abordó los retos que enfrenta su estrella, señalando la fragilidad mental como un factor crucial en su desempeño. Aunque evitó hablar de diagnósticos concretos, contextualizó las dificultades más allá del aspecto deportivo.

La ausencia de Mbappé en recientes convocatorias ha reavivado el debate sobre su rendimiento y posición en el campo. Deschamps defendió su uso como delantero centro, algo que también han hecho sus últimos entrenadores en clubes. La comparación con Olivier Giroud subraya las diferencias en estilo, pero también la versatilidad del joven atacante.

El seleccionador francés reconoció que Mbappé atraviesa un momento “complicado”. Sin embargo, confía plenamente en su recuperación, destacando su trayectoria y capacidades, que ya han demostrado ser excepcionales en otras ocasiones.

Uno de los desafíos más grandes para un futbolista es el agotamiento mental, que a menudo supera al cansancio físico. Deschamps mencionó que, mientras que la fatiga física se puede medir de manera más evidente, la carga mental es mucho más complicada de evaluar. “La mente es la que dirige el movimiento de las piernas”, enfatizó.

A pesar de los desafíos actuales, el futuro de Mbappé en la selección sigue siendo prometedor. Con el respaldo de Deschamps y una estrategia adecuada, el crack francés tiene todo para superar esta etapa y volver a brillar.