Decenas de países y organismos internacionales, entre ellos Estados Unidos, Francia y Naciones Unidas, se comprometieron a aportar mil millones de dólares a Líbano durante una conferencia sobre ayuda humanitaria celebrada en París.
De acuerdo con el ministro de Asuntos Exteriores de Francia, Jean-Noël Barrot, 800 millones estarán destinado para ayuda humanitaria y 200 millones para las fuerzas de seguridad.
«Los participantes reunidos hoy coincidieron en la urgencia de una solución diplomática que garantice una seguridad duradera para las poblaciones, tanto en Israel como en Líbano», dijo Barrot.
«Esto implica el fin de las hostilidades a ambos lados de la frontera, el despliegue masivo de las fuerzas armadas libanesas en el sur del país, el refuerzo de la capacidad (de la fuerza de paz de la ONU) para aplicar su mandato y la resolución del contencioso sobre la frontera terrestre», añadió. «Hezbollah, que tiene una gran responsabilidad en esta guerra, debe cesar sus ataques y cumplir las resoluciones de Naciones Unidas».
Por su parte, el primer ministro del Líbano, Najib Mikati, comentó: «Hoy puedo decir de verdad que siento que Líbano no está solo (…) Pero al mismo tiempo, mi corazón está triste por Líbano porque tenemos que movilizarnos cada vez más en favor de este país, que cree en la coexistencia, las libertades y los valores para protegerlo de esta injusta agresión israelí».
