La coordinadora nacional de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación, Claudia Sheinbaum, atajó los señalamientos de Marcelo Ebrard quien presumió encabezar la segunda fuerza al interior de Morena y, si bien celebró que el ex canciller haya decidido mantenerse en este partido, le recordó que en este instituto político no hay corrientes como lo establecen sus estatutos.
“No puede ser la segunda fuerza ni la tercera, ni la cuarta, porque Morena es una sola fuerza; entonces, qué bueno que él decidió quedarse, pero cuando se creó Morena, en los estatutos quedó muy claro… que la filiación es individual y directamente dice que no puede haber corrientes”, recalcó.
Ello luego de que Ebrard presumiera que durante un acuerdo con Sheinbaum para mantenerse en Morena hizo valer la segunda fuerza que –según él—significa su movimiento y grupo al interior de Morena.
Durante un mensaje realizado a través de sus redes sociales, la virtual candidata presidencial de Morena destacó la importancia de la unidad rumbo al 2024 pero aclaró a Ebrard que no puede ser la segunda fuerza ni la tercera, ni la cuarta, porque Morena es una sola fuerza.
“En los estatutos quedó muy claro que la filiación es individual”, remarcó.
Insistió en que Morena representa un proyecto de Nación, por lo cual resaltó la importancia de llegar unidos a las elecciones del 2024 que arrancan con las precampañas este próximo 20 de noviembre.
Em ese sentido, Sheinbaum previó que después de las elecciones del 2024, iniciará una reflexión sobre lo que debe ser Morena en esos nuevos tiempos.
“Viene una parte muy importante de reflexión de lo que es Morena y lo que debe ser Morena… Es importante que después del 2024, inicie una reflexión sobre nuestro partido”, adelantó.
Dijo que tras el triunfo que vaticinó en esos comicios se debe llamar al fortalecimiento de Morena para evitar que caiga en los usos del viejo partido de Estado y menos en la lógica de corrientes partidarias que tanto daño le hicieron a la izquierda.
De hecho, Sheinbaum recordó que el antecedente de Morena es el PRD y recordó la forma en que las corrientes acabaron con ese partido.
“Veníamos de otro partido, siempre fui militante del otro partido, nunca participé de más (institutos políticos) fuera del PRD; ahí había corrientes políticas y eso hizo mucho daño”, advirtió.