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En un mitin en Butler, Pensilvania, el candidato republicano Donald Trump, fue herido del lado derecho de la cara, en la oreja. Agentes del Servicio Secreto lo sacaron a toda prisa del escenario. Con el puño en alto pidió “pelea, pelea” antes de ser llevado al hospital. 

Un fiscal local dijo en una entrevista telefónica que el presunto pistolero y al menos un asistente a la manifestación están muertos. 

La campaña del expresidente dijo en un comunicado que Trump se encontraba “bien”.

“El presidente Trump agradece a las fuerzas del orden y a los servicios de emergencia por su rápida actuación durante este acto atroz”, dijo el portavoz Steven Cheung en un comunicado. 

Sin dar más detalles, Cheung dijo que el candidato republicano “está bien y está siendo examinado en un centro médico local”.

Trump mostraba las cifras de cruces fronterizos durante su último mitin antes del inicio de la Convención Republicana, el próximo lunes, cuando empezaron a sonar los disparos.

Al primer estallido el expresidente se agarró la oreja mientras se escuchaban dos estallidos más y se agachó. Se le vio enseguida con sangre en la cara.

La policía comenzó a desalojar el recinto ferial en cuanto Trump fue sacado del escenario.

La comunidad internacional, incluido el gobierno de México, se ha pronunciado al respecto.

El presidente Andrés Manuel López Obrador escribió en su cuenta de “X”: “Sea como sea reprobamos lo sucedido al expresidente Donald Trump. La violencia es irracional e inhumana”, mensaje que fue compartido por la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum.